
Todas las mañanas, el caos del tránsito en Santo Domingo es algo común. Tanto así, que no se puede abundar bastante sin imaginar las filas de vehículos en cada intersección. Algo inexplicable, como el preguntarse, porqué el parqueo del Multicentro churchill siempre está lleno, aunque sea un Lunes a las 7am.
En la Cafeteria de Teleantillas, dos camarografos se pelean por ir a cubrir un evento a media mañana, donde por cierto habrá un aguinaldo con gengibre incluido, en uno de los salones de la cámara de diputados, cuna de los imbéciles a tiempo completo de nuestro sistema de la ´dedocracia´.
Mientras degusto una taza de Café Santo Domingo, ´mi café del bueno´, todos hacemos silencio en el parqueo del canal. Ha ocurrido algo increible.
Entrando por la garita del ´guachiman´, observamos detenidamente una de las excepciones de la regla, que ni siquiera una idiota ´ley de Murphy´ puede refutar.
Se trata de la 1era agente de los AMETS, o sea mujer, que hace galas de sus curvas enfundadas en su uniforme con sombrero incluido, la cuál la hace mas apetecible. Pelo recogido en un modesto moño, dejando al aire libre un par de flequillos color azabache, como la noche que todos quisieran compartir con ella.
´jesú santisimo, con una mujer asi, me voy 200 vece en rojo´, dice uno de los tigueres que la observa.
Lo que no nos quedó claro, al momento de esa aparición, cual arcangel San Gabriel ante la madre de Dios; fue el especimen que venia con ella acompañandola. Tenia cara de llamarse Lautaro o Godinez.
En realidad, la agente en cuestión era bella como el alivio de no violar una ley de tránsito; esbelta como una macana, lista para castigar a un infractor rebelde; y sobre todo, su cara conservaba la rectitud de los rostros helénicos, asi como cualquier multa que debiera remitir.
´Loco, pero esa jeva se ta´rajando de buena como un mango maduro´ (Harold Mode On), me dijo Bobea alias ´el ajutao´, uno de los tramoyistas del canal que ´te ve como eres tú´.
En verdad, todos pensamos en ir al parqueo; salir guallando goma, chocar al compañero de al lado, hacer lo que sea pa´que esa jeva mirara a uno. Que va.
Luego de su respectiva visita en la cafeteria, para su respectivo desayuno matinal, la Amet preciosa toda ella, salió caminando al lado de su incognito y feo amigo.
– Oye pero si esa jeva se ta aplicando a ese jevo, debe tener el gusto como una cisterna – dijo uno que le llaman ´La Greca´.
– Como una cisterna? como asi pana? – pregunté.
– Oh bacano, hondo y oscuro! – dijo.
pb