Posts Tagged ‘gabo’

La Feria de las Redes.

05/06/2014

fil2014

Asistir a una fiesta donde los invitados vayan con escepticismo, es algo que debe halagar a sus organizadores. Aunque haya experimentado una baja asistencia con respecto a su convocatoria anterior.

En cuanto a mí se refiere, no puedo dejar pasar la oportunidad de quejarme y atacar como todo el que asiste a la Plaza de la Cultura, sobre como volvemos a lo mismo: desorden, caos, calor, stands innecesarios y por supuesto, menos incentivo a la lectura.

Pero antes de iniciar mi recorrido por esta decimoséptima entrega de «la fiesta de la cultura», quise `recorrer` el evento por la panacea errediana de los últimos tiempos: las redes sociales (OJO solo Twitter aplica a las RSS en ERREDE.) Y todo se leía/veía bonito. Si hasta un concurso de `selfie` había, todo auspiciado con el dinero de mis impuestos, sobre todo con una institución que nada tiene que ver con literatura (excepto, la de los libros de contabilidad que deberían auditarle 4 veces al mes, mínimo.) En fin, que el fin de semana previo a su clausura, me encaminé a la estación del Metro (recuérdenme luego escribir algo sobre la parada inicial/final de este transporte/servicio.)

Al llegar, me invadió el jolgorio y un breve sentimiento gregario me dijo que la pasaría bien. Falso. No me sentí para nada jacarandoso cuando ví que al lado del Teatro Nacional no estaba la unidad móvil de Telemicro. ¡Que decepción!… para todos los que esperaban sentirse `urbanos`. En su lugar, estaba el stand del país invitado: Panamá. Así es que seguí directo a la recién inaugurada plaza de la Cantora de la Patria, ubicada frente al teatro… Una rustica columna (hecha a la carrera), le daba el toque delicado que necesitaba la desidia reflejada en unos ladrillos azotados por el tiempo.

Pero al menos, la música de nuestra Sonia Silvestre sonaba de fondo no solo en los altavoces, sino en Café Bohemio, ese lugar exquisito para encontrarse con personas desconocidas,  y hasta con gente agradable. No sin antes evaluar el ROBO a la clara con esa declaración de gastos sobre el stand del Ministerio de Educación.

Y bueno, luego de aprovechar algunas ofertas en par de stands (librería de Cultura, Santillana e Isla Negra), el recorrido casi llega a su final con una visita al Museo de Arte Moderno, con una muestra de «Arte Panameño: Ayer & Hoy», y claro, la grata sorpresa de una expo sobre las caricaturas del siempre formidable Mercader (me dieron ganas de hacerme una `selfie`, pero luego recordé que ya no tenía chance de participar en el concurso antes mencionado.)

Mi visita a esta feria copada por el bulto mediático de las redes sociales, quedó resumida en `admirar` otros stands o encontrar ofertas literarias de Chespirito/Yoko Ono/Nick Vujicic y `obras clásicas` a mitad de precio. Por cierto, me alegra saber que Gabo fue un éxito de ventas al menos.

Y claro… saborear un pedazo de pizza en el reducido espacio que le dejaron este año al area de comida, junto a la atenta vista de dos cuerpos ante el desorden.

pb

¡Ay Gabo!

04/17/2014

image

¡Ay Gabo!
Ya si podemos hacerte unos honores, iguales o mayores que los de la Mamá Grande. Que Blacamán se encargue de las fritangas de feria. A Onésimo Sánchez le toca organizar el orden en Macondo. Si aparece un naufrago, lo investiremos como quien lleve la voz cantante de tu panegirico al ritmo de una canción de Escalona, esperando que no termine ahogado (aunque sea el mas hermoso del mundo.)
Decoremos tu legado con pajaritas de colores, que salgan los alcaravanes y los gallinazos aunque se pierdan en los laberintos de tus páginas. Ellos sabrán regresar a tiempo para el desfile que se aproxima. Para ello, montaremos una guardia de honor presidida por generales y coroneles, cada uno con una rosa sembrada en macetas de hielo.
Vamos Gabo, que el buque zarpa y tú serás el capitán que dará la orden cuando el gallo cante y esté listo para su pelea final.

¡Hasta siempre Gabriel García Márquez!

pb

Metro Feria.

04/24/2008

En la Feria, Centro de los Heróes de la ciudad de Santo Domingo, las historias se reproducen como el producto resultante del apareamiento incanzable de dos conejos en cautiverio.

Las guaguas que van en dirección oeste-este, pregonan el afán de montar a los peatones hastíados por las labores del diario vivir: ´mameye, mameeeyeee!!!; dualte con parí con aire de alaka, chofel bacano, cobradol bonito y la música que ta´alante!; guarican-yol, guarican-yol, pol lo´cuelno!!!´.

Justo al lado de la Loteria Nacional, en la Jimenez de Moya con Indepencia, se encuentran dos estaciones del Metro de Sto Dgo.

Recuerdo cuando inauguraron la Feria del Libro, considerada un bálsamo en plena campaña electoral de 2008. Como un ´regalo´ al pueblo, quién precisamente pagó con sus impuestos las ´yipetas´ y las villas en las playas de los funcionarios públicos, perdón, la construcción del Metro, el gobierno encabezado por Faraonel, dispuso que durante la permanencia de la Feria en la plaza de la cultura, todos los dominicanos usarán el servicio gratis (sí, porque se han organizado tours desde los pueblos vecinos, para conocer esta maravilla producto de la reelección).

Si Dante hubiese imaginado que recrearian una película de su ´Divina Comedia´, a lo mejor, estaría contento en su séptimo círculo. Pero si supiera que en una isla compartida (donde se hablan dos idiomas disímiles, por cierto), se recrean a diario los capítulos de su obra sin pago de copyright, estoy seguro que demandaría al estado por plagio.

Ese día que inauguraron la Feria del Libro, como a las 8:37pm más o menos, tenia los ojos fijos en el culo de una chica bella como el pecado, que se estaba dando vida con un 3×100 de cervezas en un colmadón frente a la Loteria. Un bullicio me sacó del ensimismamiento.

´Cosas veredes, Sancho´, le dijo Don Quijote a su compañero, completamente seguro de que en la vida, no nos pasan las cosas, hacemos que pasen. Y en nuestra Quisqueya saqueada, se cumple el dicho de que ´Cada pueblo tiene el gobierno que se merece´. Insólito Mejía, por ejemplo.

De una de las estaciones, veo a un grupo de estudiantes (con mochilas al hombro, y el uniforme azul con kaki), corriendo despavoridos, como potros sedados con yombina detrás de una yegua en calor. Dos policías morenomáticos, resguardan la entrada de la otra estación en el lado opuesto. Los jóvenes se dirigen en esa dirección.
Uno de los polincuentes les pregunta:
– Y utéde pa´onde van?
– Oh, a cojé el metro señol policía – responde una criatura, con la edad tierna de ´Sofía en su mundo´, pero con el kilometraje de una ´puta triste´, de las del Gabo.
– Pero utéde cren que´ta vaina e´relajo? Se acaban de apí´a, y kieren volvé a montase de nuevo? – pregunta de nuevo, haciendo resoplar sus fosas nasales, como ´Platero´.

Yo, que me he olvidado del culo de la chica, de las cervezas y de los apagones, solo por unos intantes, me quedo observando la escena, a unos cuantos ´metros´ de impuestos, digo, de distancia.

– Pero mira, recuelda que´so muchacho son etudiante, dejalo pasá, buen freco!!!.
La voz retumbó entre los cristales de la estación, y se escuchó hasta el otro lado de la ciudad, que de día, ´el sol brilla tanto, que los girasoles no saben hacía donde girar´. Era un señor vestido de militar, con más rayas en las hombreras que una zebra de las de Kipling en su ´Libro de la Selva´.

La bulla no se hizo esperar en el eco que tardó varios minutos retumbandome el oido, luego que los estudiantes, descendieran por la escalera eléctrica de la estación.

Yo volví a mi realidad, y cuando llegué al colmadón, la chica se había ido, se había terminado el 3×100, y de pronto, FÚAAA!!!, no había energía eléctrica.

– Eh Pa´lante que Vamo, barse´maricone!!! – dijo un polincuente en la estación del Metro de Santo Domingo en la Feria, del Centro de los Heróes.

pb